GOYO TORRENS

Su abuelo era bombero. Su padre también lo fue y él nunca quiso ser otra cosa. Solo sabe que lo lleva en la sangre y empezó a opositar inmediatamente para convertirse en uno de ellos. Durante sus primeros años, sirvió a las órdenes de su padre, que le enseñó todo cuanto sabe. Aquello significó el mayor orgullo de ambos. Cuando su padre se jubiló, Goyo ya estaba preparado para el puesto de Jefe de Dotación.

PARA SABER MÁS DE GOYO

Siempre rivalizó con los métodos de entrenamiento grupales de Ponce, porque consideraba que restaba libertad formativa a los bomberos para entrenarse individualmente en aquello que ellos considerasen oportuno. Este fue su principal error; pensar que cada bombero de nuevo ingreso, trae integrada la motivación y los valores con los que él entró. Y esta fue la razón por la que una catastrófica intervención alteró su enfoque personal y profesional, marcando un punto de inflexión y llevándolo a entablar una relación más estrecha con Ponce, su colega y rival, hasta el punto de que sus destinos laborales, se han unido.

CAPITÁN ERNESTO PONCE

Un hombre tranquilo próximo a la cincuentena, irradia fuerza y su simple presencia, impone respeto, aunque igualmente es respetuoso con los demás. Siempre busca la verdad. Fiel cumplidor de sus obligaciones y comprometido, no sólo con la formación técnica de los aspirantes a bombero, sino también con su formación humana. Su gesto más común e inconsciente cuando duda o cuando no está conforme con algo, es alzar una ceja. Cuando está triste o melancólico, toma una taza de café.

PARA SABER MÁS DE PONCE

Ernesto no sabe nada sobre Big data ni de inteligencias artificiales. En ese sentido es completamente subjetivo. Confía en su propio instinto y en la libertad para poder elegir. En la lucha entre los nuevos métodos de trabajo frente a los tradicionales, él siempre se posicionará a favor de los segundos. Su problema es que percibe que todos los que le rodean pueden sentir pasiones por diferentes cosas. Por el fútbol, por la familia o por el trabajo. Pero Ernesto hasta ahora sólo ha sentido pasión por los bomberos.

ADELA ROMÁN

Doctora en psicología y experta en inteligencia artificial y Big Data, Adela Román, no soporta las ineficiencias. No confía en absoluto en los proyectos dirigidos por seres humanos, en especial, los procesos de selección de las empresas. Para Adela, las ineficiencias que se generan en ese ámbito, se originan por decisiones de personas con concepciones erróneas, sesgadas por su propia mente. La realidad nos ofrece ejemplos que demuestran que la objetividad, es el camino más acertado.

PARA SABER MÁS DE ADELA

El problema de Adela es que extrapola esta obsesión a su vida personal. Su creencia de que todo está sesgado por nuestra mente, elimina todo tipo de confianza en las personas y la incapacita para el amor. Ella cree que todo está basado en casualidades y trampas mentales en las que incurrimos continuamente. Siendo así, cualquier tipo de conveniencia o comodidad puede ser confundido con amor, y ya le parece demasiado triste tener que convivir con las ineficiencias en su vida profesional como para tener que soportarlas en sus relaciones personales.

TINA RONCEL

Recién doctorada en física y a la espera de una beca de investigación en Málaga. Ha sido compañera de Mika durante sus últimos años en la universidad complutense de Madrid y su mejor amiga en la actualidad. Leal, noble, sonriente, de moral flexible, casi siempre de buen humor, contrasta con el carácter rígido de su mejor amiga. Es el acompañante perfecto para cualquier personaje principal.

PARA SABER MÁS DE TINA

Tina es una revisión actualizada del antiguo Sancho Panza del siglo XVII, esta vez en versión optimista y mucho más guapa. Las conversaciones entre ambas chispean de pura sinceridad. Entre Tina y Mika, incluso las miradas dicen mucho más que las palabras.

MOUNIR MESTA

Es el hermano pequeño de Mika. Concretamente cuatro años más joven. Es un mago de la informática y acaba de empezar a estudiar en la universidad. Sin tomárselo muy en serio, técnicamente es el alumno más cualificado. Aunque ya de por sí las carreras están obsoletas por definición, no es culpa de lo desfasada que sea la institución en sí misma. En general, Mounir no se toma muy en serio nada y en particular, el establishment actual.

PARA SABER MÁS DE MOUNIR

Para él, todas las instituciones no son más que una barrera enorme que impide a las personas de la calle mostrar sus talentos. Aprovechará la más mínima oportunidad para salirse de los «cauces oficiales» y demostrar su valía de cualquier manera posible, siempre al margen de lo establecido. Para Mounir, una vida que no te permite cierto margen de juego, no es una buena vida.